El Museo de Bellas Artes de Murcia, conocido por el acrónimo MUBAM, ha venido sufriendo una serie de avatares desde su comienzo en 1864 como Museo Provincial en que abarcaba todos los sectores de nuestro Patrimonio Artístico tales como Pintura, Escultura, Ciencias Naturales, Arqueología y en general obras de arte diversas.
Su periplo ha pasado desde su ubicación en el Teatro de Romea, al Palacio del Contraste hasta sus actuales instalaciones, cuya construcción fue encargada al arquitecto Pedro Celdrán siendo realizada entre los años 1903-1905 sobre el solar del antiguo Convento de la Trinidad.
Se inauguró en 1910 y ya en 1930 se le incorporó las dos fachadas del Palacio del Constraste al ser este demolido. Más tarde en 1970 se derivaron al nuevo Museo Arqueológico y al Museo de Salzillo las obras correspondientes a cada uno.
Entre los años 2000 a 2005 fue remodelado de nuevo diferenciandolo en dos pabellones denominados el Pabellón Contraste (por ubicar a la fachada principal del Contraste) que se observa al fondo de la foto el cual contiene las Oficinas, Salón de Actos, Salas de Exposiciones y en el sótano una Sala de Reuniones y restos de la antigua muralla árabe sobre la que se había construido el Convento de la Trinidad, y en el edificio de la derecha el Pabellón Celdrán (en honor al citado arquitecto) que aloja el Museo propiamente dicho, cuyo acceso puede apreciarse entre dos grandes búcaros.
A la derecha del Pabellón Contraste se halla otro acceso al Museo donde se halla la Fachada barroca del oeste del antiguo Palacio del Contraste de la Seda, que daba a la antigua Plaza de las Carnicerías la que es hoy Plaza de las Flores.
Estas dos fotografías se hallan en el sótano de Pabellón Contraste dejando al descubierto los restos de la antigua muralla árabe sobre la que se han ido edificando tras la reconquista de la ciudad el ya citado Convento de la Trinidad y posteriormente el actual Museo, a la izquierda de la foto (fuera de imagen) se encuentra una amplia Sala de Reuniones.
A la entrada de este pabellón y frente a Recepción se exponen temporalmente algunas obras como esta de la actual serie de “Arte Urbano”, de estilo cómic y la de abajo que es un collage compuesto con restos de chatarras.
En el rincón existente entre la Puerta Oeste del Pabellón Contraste y el Pabellón Celdrán se exponen las esculturas de Fernando VI y Bárbara de Braganza del siglo XVIII, procedentes de la galería de Reyes y Reinas que había en el Jardín de la Alameda de Colón, pero que al llegar al trono Carlos IV hizo sustituir la cabeza del primero por el suyo, y con la segunda realizar la misma operación sustituyéndola por la de la Reina María Luisa de Parma .
Puerta de acceso al llamado Pabellón Celdrán en recuerdo del arquitecto D. Pedro Celdrán que llevó a cabo última remodelación del conjunto entre los años 2000 a 2005, donde se ubica el Museo propiamente dicho que costa de tres plantas en las que se exponen todas la obras de arte de nuestro patrimonio que se hallaban desperdigadas por distintos edificios públicos, tanto pictóricas como alguna que otra escultura y otras más.
Terminando con la descripción en primer lugar de las obras correspondientes a los artistas más relevantes, incluyendo como no podría ser de otro modo las de algunos pintores murcianos.
PRIMERA PLANTA
“Adoración de los Reyes”, de Joseph Matheos
“San Francisco de Borja”, talla en madera de Nicolás de Bussy
“Caballero del chambergo”, de Nicolás de Villacis.
SEGUNDA PLANTA
“Felipe V”, de Juan Ruiz Melgarejo.
“San Jerónimo, como escrituario”, de José Ribera.
“Crucifixión”, de Bartolomé Esteban Murillo.
ENTRE LAS SEGUNDA Y TERCERA PLANTAS
Puerta de la bruja judaizante portuguesa Mari Chaves también conocida por la “Pitonisa”, que fue condenada a la hoguera junto a su hermano por el Tribunal de la Inquisición de Murcia el año 1720.
TERCERA PLANTA
“Gitana con naranja”, de Julio Romero de Torres.
“Odalisca”, de Ramón Gaya Pomes.
“Mientras rule no chamba”, de José Mª Sobejano.
“Niño muerto, estudio para el 2 de mayo de 1884”, de Joaquín Sorolla Bastida.
“Carretón y cenacho con flores”, de Pedro Flores Sánchez Picazo.
“Retrato oficial de Isabel II”, de Germán Hernández Amores.
“Mujeres”, de Miguel Baldo.
“Cabezas de pollinos”, de Alejandro Séiquer.
Y para terminar con:
“Camino del redil”, escultura en piedra de Mariano Benlliure Gil.
“Pianoforte 1777”, de Tadeo Teruel.