Se halla enmarcado al norte por el actual barrio de San Antón, al sur por la calle de La Olma ( bajo la cual circulan las aguas de la Acequia Mayor de La Aljufia (cuyo caudal se aprovechaba para mover la maquinaria de la fábrica, al no haber electricidad), al este por la ermita de San Antón (que da nombre al barrio) y al oeste por la autovía de circunvalación de Murcia.
A fines del Siglo de Oro se encontraba en el lindero con las murallas de la Arrixaca y su denominada Puerta de Molina que fue el punto de salida de los viajeros que se dirigían hacia el norte y de entrada a los que los venían, por lo que se construyó en estos terrenos primero la Ermita de San Lázaro a cuyos monjes se les encargó poner en cuarentena a los que mostraban algún síntoma de las enfermedades tan letales de la época, más tarde se erigió un Hospital en sus inmediaciones quedando ambos al cuidado de los franciscano de San Diego quienes fundaron posteriormente un Convento, hasta la desamortización de los bienes de la iglesia en que desaparecieron.
Fue entonces cuando en el solar se construyó la Fábrica de la Seda que le dió fama al barrio, hasta su demolición a mediados del siglo XX para dar paso a este jardín de la cual y como único vestigio de ella queda su chimenea.
Este jardín está diseñado con un riachuelo serpenteante y puentes que lo atraviesan circulando sus aguas entre dos pequeños lagos poblados de peces y patos, así como plantadas sus zonas ajardinadas con palmeras y otros árboles, carrizos, rosaledas y setos y en su perímetro de alrededor de 1 km. tiene una pista para poder practicar deportes como el running, patinaje, aparatos para realizar ejercicios estáticos, etc. estando muy concurrido por vecinos de todas las edades y género tanto de día como al atardecer.
Junto a los jardines de Floridablanca, del Malecón, de Fofó, de Los Colores, de las Tres Copas y de otros más pequeños contribuyen a hacer de esta ciudad una continua y espléndida invitación a conocerla y disfrutarla paseando por la misma, con el aliciente añadido de su clima ideal durante todo el año.
Veamos algunos detalles de su interior, entorno y finalmente se hará una breve referencia a la dinámica que supuso el negocio de seda para el conjunto de los tres vecinos barrios de San Antolín, San Andrés y San Miguel, donde se ubicaba la actividad artesanal de torcedores, tejedores, cordoneros, pasamaneros y tintoreros que tanta riqueza generó para la ciudad y su huerta.
En la calle de la Olma junto a esta Hornacina de la Virgen de las Angustias existe una placa indicando: “En este lugar estuvo la antigua y monumental Puerta de Molina, por donde entraron los Reyes Católicos al barrio mudéjar el 26 de abril de 1488”
Cuadro de la entrada a Murcia de los Reyes Católicos, de Andrés Sobejano
Aspecto de una antigua Fábrica
Descripción de los rincones más significativos del jardín.
Parte del lago con la chimenea
Chimenea y puente sobre el anterior lago
Paseo que lo atraviesa de norte a sur
Imágenes bucólicas de una pata con sus patitos
Gaviota patirrroja que frecuenta los distintos jardines de la ciudad
El lado menos agradable es el referido a las gaviotas petirrojas oteando desde lo alto de la chimenea, en busca del momento propicio para planear sobre los lagos en busca de sus fáciles presas de las crías de los patos de las que se alimentan.
Escultura que desde el jardín da frente a la Ermita de San Antón, que reza: “A la bendición de los animales”, por ser en esta donde cada año bendice el párroco a todos los animales de la ciudad.
Dos perspectivas de la magnífica instalación de hostelería al fondo del jardín
Curioso rincón del jardín
Esas columnas conforman una rotonda para descanso y recreo infantil
Una de las zonas de juegos infantiles
Y finalmente se describe algunos aspectos de la cría del gusano de seda y su proceso para su utilización.
Huertanas dándoles de comer hojas de morera a los gusanos en los zarzos
Gusanos de seda nutriéndose
Anatomía del gusano de seda
Haciendo el capullo de seda o capillo
Distintas fases del gusano de seda, en medio comiendo hojas de morera, al fondo capullos embojados entre las ramas y en primer plano capullos acabados
Huertanos desembojando los capullos, para ahogar los gusanos antes de que salgan las mariposas y deterioren el hilo de la seda rompiéndolo
Secuencia en la que se aprecia en el ángulo superior izquierda la mariposa, que al salir del capullo pone miles de huevos “la semilla” del próximo año
Hijuela que se obtiene al aprovechar los gusanos defectuosos o enfermos, sumergiéndolos durante un tiempo en una solución de agua y vinagre que coagula las glándulas sericícolas. Para su extracción se parte cada gusano por la mitad y se tira hacia los dos lados rápidamente pues al contacto con el aire se endurece enseguida
Maniobra de extracción de la hijuela
Mazo o moña de hijuela, la cual se estuvo utilizando largo tiempo para hilo de coser en cirugía y como sedal para la pesca, hasta que aparecieron las fibras sintéticas tipo nylon que le hizo caer en desuso